Muchas han sido las horas de viaje encima de nuestro querido tándem para poder llegar desde Pamplona a Santiago de Compostela. Mucho el sufrimiento y las penas que tanto Mon como yo hemos pasado atravesando la Cordillera Cantábrica (al llegar a León, nos dirigimos hacia Oviedo y desde allí, siguiendo el Camino Primitivo, hacia Lugo, para culminar el viaje en la ciudad del apóstol San Jacobo).

Sin embargo, el Camino tiene algo, algo que te anima a seguir, a mirar para adelante en cada pedalada, a buscar en la ayuda de los demás el consuelo de la soledad del viaje. Por eso lo terminamos, porque creíamos en nuestras posibilidades y el poder superar el reto que nos habíamos marcado.

Por esta razón, ni los 16 días de viaje, ni los 1000 Km de pedaleo, ni los ladrones de Pola de Lena, ni todo el polvo del agosto castellano nos hizo desistir de nuestro empeño. A continuación os dejamos las instantáneas de lo que fue nuestra pequeña aventura de 2010: Camino de Santiago 2010. 1000 km de viaje a bordo de un tándem.



Quizás haya sido la mejor experiencia sobre una bicicleta que hemos vivido hasta la fecha, lo que no hace sino animar a buscar nuevos retos, nuevos viajes y nuevas metas... quién sabe, quizás el año que viene, nos espere algún viaje por Europa... Eso sí, antes nos esperan los 10000 del Soplao ;-)